Seguramente usted sabe quién fue Steve Jobs.
Seguramente usted no conoce a Andre Bartley, Christopher Stringer, Daniel Coster, Richard Howarth o Jonathan Ive.
Todas estas personas (y ocho más) trabajan o trabajaron en Apple y han participado en la creación de más patentes para la empresa que el propio Jobs.
Recientemente se publicaron infinitas notas y comentarios, algunos de ellos hacían referencia a la participación del ex-CEO de Apple en las patentes de la empresa como inventor. La idea de esta nota mostrar un enfoque diferente, explorando cuantitativamente la red de co-invención de Apple y ver si se puede observar alguna dinámica de creación dentro de la compañía y el rol de Jobs en ella.
Si analizamos la distribución de la cantidad de inventores por patente se observa una particularidad. Lógicamente a mayor cantidad de inventores menos patentes, esta es la distribución normal, lo que uno espera de casi cualquier conjunto de patentes. Sin embargo hay un nuevo pico entre 10 y 17 inventores. Esto hace pensar en la existencia de un grupo de elite dentro de la empresa. ¿Está Jobs en él? Al parecer si, dado que casi la totalidad de las patentes en las que participa Jobs han sido generadas por grupos grandes.
En el siguiente gráfico, que muestra la cantidad de patentes por inventor considerando si la patente tiene más o menos de nueve participantes, puede verse con claridad la división que antes comentaba. Los que inventan en el grupo de elite, por lo general no inventan fuera de él y viceversa.
Si bien individualmente los que patentan en el grupo tienen muchas más patentes que los que no, en el total el peso del grupo de elite (228 patentes) es mucho menor que el resto (1741 patentes). Pero en el último tiempo esta diferencia se ha reducido sustancialmente.
El dato más interesante es la coincidiencia de la aparición de este grupo de elite con el regreso de Jobs a la empresa en 1997.
La aparición del grupo también coincide con la caída sustancial de las patentes fuera del grupo, lo que parece indicar una transferencia de recursos hacia el equipo de Jobs. Teniendo en cuenta tanto la fecha de solicitud como la de publicación la conclusión es la misma. Y si en lugar de valores absolutos vemos el gráfico en porcentual este cambio de comportamiento interno se muestra aún más dramático.
Dentro de las patentes del grupo de elite han participado 119 personas. Si consideramos a los que han participado en más de 15 patentes podemos identificar al grupo con 20 personas, y si observamos la participación de estas personas en el tiempo podemos entender incorporaciones y retiros, así como el peso de cada uno en el total y en el tiempo.
Para entender el futuro de Apple sin Jobs es interesante seguir la evolución de este grupo en las solicitudes de patentes. Si bien, como mencionábamos antes, fuera del grupo también hay mucha actividad inventiva, la participación de Jobs en él hace pensar que cualitativamente su incidencia fue importante y por lo tanto su continuidad es vital para la empresa.
Es posible profundizar en la dinámica de este entramado a través del análisis de redes sociales. También resulta intersante explorar el contenido de estas patentes a través de herramientas de minería de texto y visualización de información. Pero eso queda para otro post.
Finalmente es necesario hacer explícito el corpus de análisis sobre el que trabajé.
Son 1971 patentes concedidas en EEUU, publicadas entre el 23/1/1979 y 15/11/2011. Encontrarán diferencias con otras cifras mencionadas en otras notas, algunas razones para esto son: porque han tenido en cuenta las patentes solicitadas (no solo las concedidas), porque no han depurado por familia de patentes (yo si lo hice), porque consideran patentes fuera de Apple, o porque utilizaron otra estrategia de búsqueda.
Para recuperar estas patentes tan solo busqué "apple" en el campo assignee (titular). Esto no es del todo correcto ya que la empresa puede operar a través de subsidiarias y por otro lado traerá alguna empresa o persona con "apple" en su nombre (ej. Marc Apple) pero que no es la que nos interesa. Sin embargo, a efectos de este pequeño experimento es suficiente, son pocos casos.
Por otro lado, solo unifiqué los diversos modos de escribir Steve Jobs, pero no hice lo mismo con otros inventores. Esto tampoco es lo ideal, pero si es suficientemente bueno para intentar entender algunas tendencias.
Más información: info@patentnapsis.com
